¿Naturaleza convertida en Antinaturaleza? ¿Destino neurótico de las cosas?
Los pintores imponen su experiencia.
"Un día, la pintura de Van Gogh, munida de fiebre y de buena salud, regresará para lanzar al aire el polvo de un mundo enjaulado que su corazón no podía soportar más" dijo Francis Bacon.
Para que la tragedia pueda ser dicha sin tapar el horizonte hace falta "una fuerza envolvente, un elemento arrancado al corazón"- expresó Antonin Artaud en relación a Van Gogh: "organista de una tormenta detenida".
El planeta, en su pintura, es rara tierra, rara esfera estriada, "paisaje cortado, labrado y apretado por todos lados por un pincel borracho".
La forma persiste a través de lo deforme.
El asunto de la pintura no es pintar cosas visibles, es pintar fuerzas que se ejercen.
Y los pintores deforman, no transforman.
No hay diferencia entre un hombre de la prehistoria, con sus manos negativas sobre las paredes de las cuevas, y Van Gogh o Bacon en su taller.
Se trata siempre de un acto de magia eficaz absolutamente concentrada.
La pintura es un abismo ordenado.
(referencia: Philippe Sollers)
Pinturas de Van Gogh
Cueva de las manos, Río Pintura, ruta 40 ( República Argentina)
Francis Bacon, Tríptico
No hay comentarios:
Publicar un comentario